Las piscinas en Islandia siguen unas normas de higiene muy estrictas. Todo el mundo debe ducharse desnudo antes de entrar a la piscina. ¡No te asustes! Mujeres y hombres tienen baños distintos. Ducharse desnudo en las piscinas públicas es algo corriente para los islandeses, aunque también puedes encontrar duchas individuales con cortina en caso de que no te sientas cómodo. Debes saber que las instalaciones de la piscina no son sólo para los usuarios que vayan a nadar –mucha gente acude sólo para relajarse en los hot pots (fuentes termales), en las salas de vapor o en los jacuzzis.
Más que un elemento de ocio, la piscina es toda una institución en Islandia (hasta el pueblo más pequeño tiene una). Las piscinas se mantienen a una temperatura de unos 30 grados Celsius, siendo de 37 a 43 grados la temperatura que alcanzan las fuentes termales. No dudes en ir a la piscina en pleno invierno. Tras 10 minutos dándote un baño termal a 40 grados, podrás pasar directamente a la piscina sin la más mínima sensación de frío.
La piscina de Hofsós, Skagafjörður, es conocida en Islandia por sus extraordinarias vistas. Mientras tomas un baño puedes contemplar su espectacular vista de la península Þórðarhöfði, la isla de Drangey y el fiordo Skagafjörður. La piscina mira al mar, dando la sensación, según podrás observar en fotografías tomadas desde ciertos ángulos, de que la piscina y mar se llegan a fundir.
La piscina local de Akureyri consta de dos grandes piscinas, una pequeña para niños, cuatro fuentes termales, dos toboganes y una sala de vapor. Este extenso complejo de piscinas se adapta a todo tipo de usuarios, disponiendo incluso de una piscina de agua fría para los más valientes. Merece la pena que hagas una visita cuando estés en Akureyri.
Mientras visitas la hermosa península Seltjarnarnes, al oeste del centro de Reykjavík, pásate por la piscina local, compuesta por una gran piscina de agua salada, una piscina infantil, cuatro fuentes termales y una sala de vapor. Sin lugar a dudas este es el sitio perfecto para relajarte después de una ajetreada mañana de turismo por Reykjavík.
La piscina Hreppslaug, cerca de Borgarnes, fue construida en 1928 y se encuentra protegida como patrimonio cultural. La piscina se encuentra rodeada por un magnífico entorno natural de aguas termales que abastecen las piscinas de Hreppslaug de agua caliente natural.
Francisco, Islandia-Tours.blogspot.com
Enero del 2016
