En los viejos tiempos, bjúgu (eran salchichas grandes, aproximadamente de seis veces el tamaño de un perrito caliente) se colgaban de las vigas de las casas fuera del alcance de los gatos, perros y niños.
Aunque Bjúgnakrækir, el ladrón de estas salchichas, tiene avanzada edad sigue siendo lo suficientemente ágil como para subir fácilmente hasta las vigas más altas.
Todavía es posible encontrar bjúgu en las tiendas, pero el popular perrito caliente de América está tomando rápidamente su lugar.
"Quién sabe, si en los próximos años Bjúgnakrækir incluso podría ser re-bautizado como "el ladrón de los perritos calientes"
"Es fácil imaginar a Bjúgnakrækir dejarse llevar una vez que come esta salchicha, es decir, que de la alegría haga travesuras"
Adrián, Islandia-Tours.blogspot.com
Diciembre del 2015